jueves, 30 de marzo de 2017

Los apóstoles de la digitalización compulsiva, los adoradores de la pantalla eléctrica, los fieles de la divinísima Internet, los satanizadores del papel y la tinta, los fundamentalistas de la modernidad más desalmada, han tomado las aulas, y anuncian que vienen para quedarse. A saco, sin filtro, con esa fijeza dócil y perentoria que les va abriendo las puertas de su cielo. Su credo es tan convincente que cada día suma adeptos: no se puede luchar contra el futuro, al parecer irreversible; no se puede ir contra la corriente de unos tiempos que encumbran la virtualidad y la inmediatez, que se felicitan de la globalización de lo superfluo. Inútil recordarles que hay futuros que no tienen porvenir.

2 comentarios:

Isabel Martínez Llorente dijo...

Acaba de salir un informe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), Students, Computers and Learning, que relaciona los resultados en todos los países de la OCDE con el uso de ordenadores en casa y en el colegio. Las conclusiones, sorprendentes para unos (y no tanto para otros), se resumen de la siguiente manera:

· Los países que han invertido mucho en nuevas tecnologías en la educación no muestran mejoras apreciables en lectura, matemáticas o ciencias. En cambio, los que no han hecho esa inversión, han mejorado rápidamente sus resultados en todos los parámetros. (p.151)

· En general: un uso limitado del ordenador en el colegio puede ser mejor que no usarlo nunca. Sin embargo, un uso del ordenador en el colegio por encima de la media de la OCDE (España está por encima de la media) da resultados significativamente peores. (p.148)

· Los alumnos que no usaron el ordenador en sus lecciones de matemáticas obtuvieron mejores resultados en las pruebas en matemáticas (tanto en formato digital como en papel). (p.154)

· En los países en los que era más corriente el uso de Internet en el colegio para los deberes, el rendimiento en lectura bajó.

· Las competencias esenciales para la navegación online pueden ser aprendidas con herramientas pedagógicas convencionales, analógicas.

· En general, la tecnología no ayuda a cerrar la brecha que existe entre los alumnos favorecidos y desfavorecidos.

· La mejor forma de preparar al alumno para el mundo digital no consiste en facilitarle el acceso a servicios y dispositivos de alta tecnología, sino en potenciar la lectura y las matemáticas.

Extraído de aquí: http://apegoasombro.blogspot.com.es/2015/09/la-verdad-sobre-la-digitalizacion.html

L'Ecouyer... certera, como ya vimos, en sus análisis. Debería ser lectura obligatoria para muchos docentes...y padres. Ya que no impera la sensatez, que la lectura ilumine a estos "integrados". Nosotros, por fortuna, seguimos siendo "apocalípticos".

Pedro López Martínez dijo...

Muchísimas gracias.
Tu información confirma y realza mis peores presagios, aportando una referencia fundamental, de prestigio, fiable y contrastada. Impagable.