domingo, 6 de septiembre de 2009

TELE (DISTANCIA) SORDO, FONO (SONIDO) MUDO

La historia de tan utilísimo aparato móvil (allende los mares celular) ha venido a modificar el orden de las relaciones, el orden del boca a boca, el orden dentro del desorden existencial de cada cotidianeidad, anclando ese sonido -que se torna canción hortera dependiendo del usuario- en un sonido muchas veces anhelado, otras tantas detestado. Por momentos se desea que suene, que al fin llegue el sms (Su Majestad Soñada), o que la voz del otro lado nos dulcifique las ausencias impuestas; otras muchas querríamos no haberlo escuchado, no haber cedido siquiera a la tentación de rifar una respuesta, para no caer en la red de su hechizo.
La historia de tan utilísimo aparato bien podría medirse, en la mismidad de cada uno, como aquel objeto que, sin apenas ser percibido, ha mediado maravillosamente en la gesta de los grandes momentos de la vida. Y luego hablemos de tirarlo o de silenciarlo o de no encenderlo más. ¿Quién lo cree? Ingratos que somos…

1 comentario:

El color del viento dijo...

Creo que todos nos sentimos un poco "atrapados" a él, como portador de buenas o esperadas noticias.
Confieso que alguna vez lo he mirado esperando que me sorprendiera.